Claire tiene un jefe infernal. En serio. De verdad, es el Diablo. Terminó en aquel empleo cinco años atrás, cuando su madre intentó zafarse de su trato muriéndose. ¡Ja! La broma recayó en Claire. Y también la deuda de su mamá.
En este empleo, no quieres recibir la carpeta roja de RRHH. El paquete jubilatorio es una porquería. Y un telegrama de despido es un boleto de ida al Infierno.
Pero, cuando acusan a Claire de haber asesinado a Junior (el hijo inmortal del Jefe), no sirve de nada declararse inocente. Alguien está tendiéndole una trampa, y ella no tiene más opción que huir e intentar averiguar por qué tiene una diana en la espalda.
Su única esperanza es resolver el asesinato de Junior antes de que los Limpiadores la capturen. No contaba con ser secuestrada por los cuatro descendientes del Infierno más peligrosos que existían. ¿Y descubrir que existe un secreto que fluye por su sangre del que ni siquiera ella estaba al tanto? Eso es la frutilla del postre del Inframundo.
Nota para el lector: El libro 1 de esta serie de cuatro libros incluye una ruda joven paranormal con un empleo de asistente personal para nada glamoroso, una misión que la lleva desde el soleado Caribe al definitivamente no soleado Inframundo, druidas, demonios, paganos, y al jefe infernal. Te aconsejamos leer la serie Reinos Oscuros en orden.
