Susan Fish, de 60 años, había renunciado a la ambición de su vida de convertirse en maestra.
Sin embargo, en una fiesta de Halloween, descubre a unos ogros controladores que intentan exterminar a su amigable esposo, Matthew Greenway, y decide que es hora de cambiar.
Con la necesidad de unos dados y monedas flexibles, Susan, modesta y esperanzada, llega a Oxford para ir de compras.
Habiendo llevado una vida soñolienta, Susan se encuentra incapaz de encontrar monedas flexibles en Oxford. Así que, en su lugar, se propone adquirir algunas monedas flexibles de Chicago.
Pronto, tiene todas las monedas flexibles que necesita y comienza a solicitar en secreto trabajos de maestra. Pronto se da cuenta de que los ogros controladores planean sabotear sus nuevas perspectivas profesionales y decide tomar medidas.
Sin embargo, cuando Susan se enferma con cejas gangrenosas, parece que los ogros controladores prosperarán.