Si usted es un asiduo lector de la Biblia seguramente ha notado cuán grande y maravilloso ha sido el respaldo de Dios para con sus siervos en esos tiempos.
Tal vez se haya preguntado, ¿qué tenían esos hombres y mujeres que los hacia especiales para Dios?
En su libro Corazón de Siervo. Daniel Azpiolea contesta esa pregunta, y tal vez esa respuesta no es la que usted espera. Dios no escogió a estos héroes bíblicos por ser dignos, o fuertes, o inteligentes. No. Dios los escogió a pesar de sus debilidades, errores y excusas, para manifestar al mundo a través de ellos Su virtud, Su amor, y Su gracia. Hombres de fe, que aceptaron los desafíos, y que fueron moldeados por Él para el cumplimiento de sus propósitos.
Asimismo, Corazón de Siervo le hará notar a usted, lector, que Dios continúa escogiendo a sus siervos, entre los cuales está usted.
Él lo llama de manera irresistible, Él es quien estará siempre a su lado proveyéndole todo lo necesario para el cumplimiento de sus propósitos.
Jesús dijo que le pidamos al Señor de la mies que envíe los obreros a su mies, y esta es la oración constante del autor a lo largo de estas páginas.
Un día como hoy, David fue enviado a su mies, Pedro fue enviado a su mies, Pablo fue enviado a su mies, y ellos estaban tan sorprendidos como usted.
¿Cuál será su respuesta?