De lo que estamos hablando, en forma muy rotunda, muy brusca, es esto: la eficiencia de un individuo puede modificarse, y la eficiencia de un individuo puede aumentarse; se puede mejorar o se puede empeorar. - L. Ronald HubbardEs del individuo de lo que depende el éxito de una organización y, de hecho, el de una civilización. Aquellos que logran hacer más cosas con menos esfuerzo están más dispuestos, son más capaces, y de hecho, más eficientes. Sufren menos estrés y tensión emocional. Están mejor preparados para tomar decisiones clave. Y según la eficiencia se incremente a lo largo de industrias enteras, toda la sociedad se beneficiará. Ése es el tema de El Aumento de la Eficiencia, en el que el señor Hubbard revela descubrimientos que proporcionan un punto de vista totalmente nuevo respecto a la eficiencia; no en un sentido mecánico, sino en cuanto a pensamiento, emoción y esfuerzo. Además, aquí se encuentra la explicación de por qué el abordar el pensamiento es de importancia capital, ya que sólo el pensamiento puede cambiar la emoción y el esfuerzo. Por lo tanto, dentro de esta conferencia se encuentra el “secreto” de la eficiencia y los medios mismos para superar los caprichos de la emoción y el esfuerzo del trabajo. .
