Es la primera novela de los Episodios Nacionales que abandona el realismo y la correspondencia cronológica con la Historia, barajando los parámetros de tiempo y espacio como en un cuento fantástico.a Para esta innovación literaria Galdós crea un nuevo personaje, Proteo (Tito) Liviano, escritor y periodista de El Debate, ferviente republicano, buen orador y afortunado galán en la amenidad de sus conquistas amorosas en el Madrid decimonónico. Con él, en la misma ensoñación, crea Galdós a Mariclío, a imagen y semejanza que el personaje de la «Madre» El caballero encantado, llamada también "Tía Clío Mariana", una especie de musa o personificación de la Historia de España, mujer de elevada edad, aspecto cambiante y conducta extravagante, «personaje numinoso omnipresente», que toma a Tito bajo su protección y le transforma en «duendecillo invisible» para que actúe de observador de los acontecimientos históricos y se los transmita a continuación.