Durante los primeros años de la aviación, la gente buscaba constantemente usos prácticos para los aviones. La gente estaba asombrada con las máquinas que permitían a los hombres volar, pero la cuestión de qué hacer con ellas asaltaba la mente de todos.

Por supuesto, los usos de los aviones no podían limitarse al entretenimiento, porque eso sería desperdiciar el enorme potencial de la tecnología en una industria bastante superficial. La industria del transporte aéreo se inició con el viaje de un perno de seda de Dayton a Columbus (Ohio) en noviembre de 1910.

Ese fatídico viaje dio origen a la industria del transporte aéreo tal y como la conocemos hoy.

Después de ese acontecimiento, todo avanzó hacia nuevas cotas para la industria de la carga aérea. Uno de los pioneros de la industria del transporte aéreo es American Railway Express.

El nombre de la empresa señala el hecho de que, antes de la llegada de la industria del transporte aéreo, la carga solía transportarse en tren.

La industria de la carga aérea hizo posible muchas comodidades. En primer lugar, la rapidez. El transporte aéreo aceleró las entregas entre empresas. Esto significa que la industria del transporte aéreo hizo posible que las empresas adquirieran diversas mercancías cuando las necesitaban.

Esto también permitió ahorrar mucho dinero en almacenamiento. Antes de la llegada de la industria del transporte aéreo, las empresas tenían que mantener la mayor cantidad de existencias posible.

 Esto les ayudaba a cumplir con los pedidos a tiempo. Gracias a la introducción del transporte aéreo, las empresas podían enviar por avión cualquier mercancía.

La industria del transporte aéreo de mercancías tuvo un comienzo lento debido al hecho de que tenían una fuerte competencia por parte de los transportistas de pasajeros. Muchos transportistas de pasajeros establecidos se opusieron a la creación de un sector de transporte aéreo de carga, principalmente porque temían que desestabilizara la industria aérea.

La revolución de la industria del transporte aéreo de mercancías se produjo cuando un hombre llamado Fred Smith se dio cuenta de que la práctica común de combinar el transporte aéreo de mercancías con el de pasajeros era muy ineficiente. Propuso que los fletes aéreos tuvieran patrones de vuelo diferentes a los de los pasajeros.

Consiguió reunir fondos sobre todo gracias a su propuesta de un servicio garantizado de entrega al día siguiente. Y así fue como, en abril de 1973, el Federal Express comenzó a operar. Por supuesto, los primeros años de negocio fueron duros. Sin embargo, después de tres años de vuelo de carga, la empresa empezaba a dar beneficios.

En la década de 1980, FedEx era un nombre muy conocido. Esto demuestra lo lejos que puede llegar una idea verdaderamente genial. Hoy en día, el sector de la carga aérea está en auge y las empresas obtienen millones de dólares de beneficios. Eso está muy lejos de la forma en que las empresas de transporte aéreo perdían dinero en el pasado.